A veces hago cosas sueltas, y no sé muy bien que hacer con ellas.
Araña que me acompaña
Esta no es mía, es de Elvira, mi profesora de pintura, que no pudo evitar mirar esa naranja enmarcada.
Dando premios de un concurso de relatos, en Camargo, me gustó la combinación de los tres elementos.